Música y Matemáticas...
En cuanto a música se refiere, me gusta escuchar lo que hoy se denominan "rock clásico" y rock progresivo", tanto como me gusta escuchar música clásica, lo cual me convierte en bicho raro. A mi madre le gustaba la música criolla y las baladas de Julio Iglesias, y a mi padre el swing y el jazz, mayormente música instrumental, que disfrutaba en Long Plays ya sean estéreo o cuadrafónicos. A mi esposa le gustan las canciones románticas en español que yo aborrezco, y a mi hija le gusta el Pop moderno, que estoy intentando escuchar, para tener algún tema de conversación con ella.
Siempre me atrajo la música clásica, porque en general, no cantaban como en lo que escuchaba mi mamá, y existe un orden y una estructura en la melodía, lo cual a veces no existía en lo que escuchaba mi papá. Por otro lado, supongo que tanto el rock clásico como el rock progresivo, deben ser una especie de "gusto adquirido", porque es lo que escuchaba con mis amigos en mis épocas de adolescencia: Queen, Alan Parsons, Genesis, Yes, Supertramp, etc, que en mis épocas eran música estridente según mis padres, de la misma forma en que hoy percibo lo que escucha mi hija... Supongo que la historia se repite ¿no?
Recordemos que la música en la antigüedad, formaba parte de las matemáticas. Se sabe que en China, Egipto y Mesopotamia desde épocas memoriales, se estudiaron los principios matemáticos del sonido. En Grecia, a partir de Pitágoras, se estudiaron las escalas musicales como proporciones numéricas, pues su teoría en ese entonces, era que toda la naturaleza consistía en una gran armonía que se generaba desde los números, pues la música es la expresión artística de las matemáticas (teoría de la Armonía del Cosmos).
En la edad media, la música no se consideraba un arte, sino una ciencia relacionada a la matemática y la física, sobre esta última, con la acústica. Claro, una cosa es relación y otra cosa es que sean lo mismo, por eso hoy la música es un arte... Resulta que la música es emoción, puede ser alegre o triste, sin embargo, no existen proposiciones matemáticas alegres o tristes; pues son lo que son. Para hacer música, necesitas instrumentos físicos, para hacer matemáticas, solo necesitas abstracción.
Leibniz decía que la música es un ejercicio aritmético inconsciente, pues el músico cuenta los tiempos del compás al empezar a tocar una pieza nueva, pero luego de la repetición, ya no cuenta (al menos conscientemente), sino que deja fluir la melodía. Todos los elementos musicales se definen con números: 5 líneas en el pentagrama, 12 notas por octava, compás de 3/4, 7/8, etc.
Entonces, si la música tiene esa perfección matemática, ¿cómo es que haya tantos gustos y tan variados? Supongo que será porque es un arte, por eso es que encontramos pinturas o esculturas preciosas y pinturas o esculturas que odiamos nada más al verlas, por eso hay libros que no podemos dejar de leer hasta terminarlos y libros que nos hacen dormir sin poder terminar una página; y claro, porque como seres humanos todos percibimos diferente. Por otro lado, las personas de la misma generación pueden gustar del mismo tipo de música por la socialización y la amistad, por eso generalmente gustas de la misma música que tus amigos...
Pero lo que nadie podrá negar, es que la mujer (más que la matemática), es como la música: Hay que saber tocarla, pero también hay que saber escucharla...
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